-¿Puedo ver a Kiwi?-le preguntó Irene a Elena.
-Sí...Esta vez te has acordado, eh?-respondió Elena.
Elena fue al salón, seguida de Irene.
-Míralo. Oins... Es muy "cookie"-dijo Elena contemplando al pequeño hámster.
-Ohh, es verdad. Pero pobrecito, está solito-añadió Irene.
-Sí...-dijo con tristeza Elena.
Entonces, en ese momento, Irene pensó en una buena idea.
Luego, ella dejó su ropa en su armario bien ordenada y se sentó a revisar su Gmail.
Solo tenía uno, y era de Peter.
-¿Me llamará? ¿O le llamo yo?-pensaba una y otra vez Irene.
En unos minutos, el teléfono de su casa sonó.
Irene recorrió los pasillos corriendo, bajó las escaleras, pero su madre ya lo había cogido.
-¿Sí? Huy hola. ¿Qué tal? Me alegro de que estés bien. ¿Que te pase a Irene? ¿Para? Si tú lo dices...-dijo Cristina hablando con Peter desde el teléfono.
Irene cogió el teléfono y subió de nuevo a su cuarto.
-¿Diga? Hola... ¿A patinar? ¿Sobre hielo? Vale, aunque no sé muy bien. Pues por la tarde entonces. Sip. Jeje, gracias. Adiós, hasta luego-habló Irene con Peter.
La conversación había sido muy corta, pero los dos la habían disfrutado.
Más tarde, Irene se fue a jugar con Elena al Gestos, hasta la hora de comer.
Después de comer, en la cocina, mientras Irene ayudaba a su madre (Cristina), a lavar los platos, Irene le contó su idea.
-Mamá, he tenido una buena idea.
-¿Cual?
-Pues mira, para Reyes, le voy a comprar con mi dinero otro hámster a Elena y otra jaula.
-¿Otro?
-Sí, Elena dice que siente solo. Porfaaaaaa, además, es un acto solidario por mi parte.
-Venga vale. Pero recuerda, es como si se lo hubieran traído los Reyes.
-Sí mami. ¡Gracias!
Irene se fue satisfecha de la cocina. Vio un película junto con su padre, y a las 4:30 recibió una visita inesperada.
-¡Laura!-exclamó Irene.
-Hola Irene.
Se dieron un abrazo y siguieron hablando.
-¿Qué te trae por aquí?
-Pues, ya que pasaba quería saludarte y decirte que pasado mañana, el Viernes, iremos todas al cine. ¿te apuntas, verdad?
-¡Pues claro! Una cosa...siento lo de tu abuela-respondió Irene.
-No pasa nada-dijo Laura mientras una lagrimilla se le escapaba, aunque se la quitó rápidamente.
-Pues nos vemos. Adiós Irenita. Por cierto, todas te echábamos de menos-se despidió Laura.
Irene sonrió y se metió a dentro de nuevo.
Se arregló y se maquilló como mejor pudo. Se dejó el pelo suelto. A las 5:15 salió de su casa, y esperó en la calle. En menos de cinco minutos, Peter ya estaba allí.
-Hola Irene...Si que has cambiado-le dijo Peter a Irene.
-Mmm...Si solo he estado un trimestre fuera.
-Ya, pero yo hacia tiempo que no te veía.
-Ah claro.
Caminaron un cuarto de hora. Cuando llegaron a la pista de patinaje, se dieron cuenta de que no había mucha gente, lo que hizo un poco incomoda la situación.
Se pusieron los patines y salieron a la pista. Al principio Irene se resbalaba, pero ahí estaba Peter para cogerla. Irene se sentía incomoda. Pese que le gustaba patinar, no lo estaba pasando bien.
-Peter, me voy. Mira, te lo voy a decir. No lo estoy pasando bien, me encuentro incomoda. Creo que mejor... Terminemos esa relación rara que tenemos. Lo siento-decidió decir la joven gimnasta.
Edu se quedó un poco asombrado.
-Vale Irene. Te comprendo. No pasa nada. Yo te seguiré queriendo igual-contestó Peter un poco triste.
Irene salió de la pista con prisa.
Peter contempló como esta salía.
Total, que sobre las 6 menos cuarto, Irene estaba devuelta en casa.
Como se aburría, llamó a Noelia:
-¿Noe?-dijo Irene.
-¡¿Irene?! Hola cariño. ¿Qué tal?
-Muy bien guapa, ¿Y tú?
-También. Pasado mañana al cine, ¿Eh?
-Sí, sí-respondió Irene sonriendo.
-¿Que me cuentas?
-Nada. Bueno sí, muchas cosas, ahora no hay tiempo...
-Que si que hay tiempo, es más, tenemos todo el tiempo del mundo.
-¿Por aquí? Mejor no.
-Mira, hace un mes, sobre a principios de Noviembre, inauguraron un Starbucks.
-¿Sip?
-Sip. ¿Quieres que me acerque a tu casa y vamos las dos?
-¡Vale! Invito yo ¿Oki?
-No. Que tú eres la que viene del internado. Además, que tengo mucho dinerito.
-Y yo. Pero si insistes...
-Vale, en 10 minutos estoy allí.
Noelia colgó.
Irene esperó en el salón contemplando como Kiwi subía y bajaba de su tobogán y de las escaleritas.
Sonó el timbre de su casa y salió disparada.
-¡Mamá me voy con Noe !-gritó Irene abriendo la puerta.
Irene saltó hacia Noelia.
-¡Noelia!-gritó entusiasmada.
-¡Irene!-devolvió el entusiasmo Noelia.
Anduvieron charlando hasta el Starbucks.
Irene le contó que su lista de mejores amigas de había ampliado.
Se sentaron y pidieron. Charlaron un montón, pero sobretodo Irene fue la que más contó.
Al acabar, el móvil de Irene sonó.
-¿Diga? ¡Nicol! Aja...Mmm...¿Cuando vayamos, verdad? Vale, gracias. Y por cierto, he dejado a tu primo. Ya hablaremos otro día. Sí. Adiós guapetona.
-¿Quién era?-preguntó Noelia.-Además, me tienes que contar eso de: he dejado a tu primo.
-Una amiga de allí. Y ya te lo contaré, ahora no.
Cuando salieron del Starbucks, ya se había hecho de noche.
-Te acompaño a casa-dijo Noelia.
Llegaron a casa de Irene, y Noelia se despidió.
-Mamá, he vuelto. Voy a cogerte un momento un perfume que tienes tú en tu baño...-anunció Irene subiendo las escaleras.
-No Irene, no-le negó Cristina.
Pero Irene hizo caso omiso y siguió subiendo.
Cristina siguió a Irene, intentando pararla. Pero fue demasiado tarde.
Irene abrió la puerta del baño de sus padres y se llevó una sorpresa enorme. El baño estaba reformado y con un jacuzzi. Y Elena apunto de meterse dentro.
Irene abrió los ojos mucho y luego añadió:
-¿POR QUÉ NO ME LO HABEIS CONTADO?
-¿Y yo qué? ¡Un poco de intimidad!-exclamó Elena tapándose con una toalla.
-Era una sorpresa cariño-explicó Cristina.
Irene gruñó y luego dijo sonriente:
-Elena, haz un sitio, que haya voy.
Cristina se sintió aliviada y bajó abajo.
Elena estaba contrariada, pero no se quejó.
Disfrutaron hasta la hora de cenar el jacuzzi. Se relajaron, jugaron y hasta encendieron la radio y hicieron como pudieron bailes.
Luego se vistieron con sus pijamas y cenaron en família, como hacían antes de que Irene se fuera.
Me encantaaaaa
ResponderEliminarCreo que este ha sido el mas largo,pero tambienmuy chulo!me he hecho un lio cuando te has equivocado y has puesto edu en vez de peter,
PERO ESTA GE-NIALL
Bye y Muakis!!
Ja sí, pero luego lo he actualizado y las que lo lean saldrá Peter. Y gracias por lo de GE-NIALL, como sabes que lo adoro... Muchas gracias por tus comentarios guapa!!
EliminarMuakis
De nada guapaa
EliminarBRAVO!!!! I <3 YOUR BLOG
ResponderEliminarMeee encanntaaa:)
ResponderEliminarSi es que es genial tu novee:)
La amo:) Y el capítulo más todavía:) Oh, Pobre Peter... Aunque me ha encantado lo del jacuzzi jeje que calladito se lo tenían madre e hija:)
El siguiente ya, que lo adoro:)
Besitos:)
me gusta mucho la historia pero preferia que no cortaran :(
ResponderEliminarHola! ¿Eres una nueva lectora, o ya leías y no comentabas?
EliminarMe alegro de que te guste la historia, y siento lo de que cortaran, pero si lees el capitulo 28... verás que Irene ha conocido a otro chico!
Gracias por comentar.
Muakis