Ya descubrieron quién fue el chivato: Mireya. Tenía celos y por eso hizo eso, pero prometió que no lo volvería a hacer.
El Viernes por la tarde, de la primera semana de Diciembre, Irene, Alberto, Nicol, David, Claudia y Carol quedaron el la chocolatería Valor.
Se suponía que Alberto y Nicol estaban saliendo, pero ellos no habían comentado nada.
Se sentaron en una mesa y llamaron a una camarera.
Pidieron 6 chocolates calientes y una docena y media de churros.
Nicol se sentó al lado de Alberto. Se rozaban con el codo, pero nada más.
-Nicol y Alberto, ¿Estáis saliendo?-preguntó descaradamente Carol.
Los dos se ruborizaron notablemente.
-Hijos, que me tenéis esperando-se quejó Carol.
-Ehh, eso es privado-consiguió decir Nicol.
-¿Llamas a eso privado? Osea, no me cuentas esto porque dices que es "privado" y si que me cuentas que talla de sujetador gastas-le dijo Carol.
Nicol le dio un pisotón por debajo de la mesa.
-Sí Carol, es privado-le defendió Alberto.
-Igualmente Alberto, se nota que le quieres. Tu le lanzas miraditas, ella te lanza miraditas, os ruborizáis cuando dicen vuestro nombre juntos, os habéis besado...Es obvio que estáis saliendo-argumentó Irene.
-Mejor dejemos este tema-dijo Claudia.
Llegó la camarera con los chocolates y los churros.
-Muchas gracias-dijo David.
La camarera le sonrió y se fue.
-Este chocolate está muy dulce, como me gusta a mí-dijo Alberto.
-¿Así? Entonces, ¿Por qué te gusta Nicol, si se supone que ella era "salada"?-le dijo Carol a Alberto.
-¿Qué, a ti que más te da?-le contestó Alberto.
-Pues a mi me da que no quiero que Nicol vuelva a sufrir por un chico.
-¿Nicol, tú tenías novio?-le preguntó Alberto incrédulo.
-Sí-afirmó Nicol.
-¿Y por qué no me lo has dicho?-dijo Alberto un poco enfadado.
Nicol iba a contestar, pero antes Carol dijo:
-¿Qué, a ti que más te da?-imitando a Alberto.-Si total, no tiene porque contestarte si no estáis saliendo del todo.
-Uy,uyuy. Aquí tienen que poner palomitas, esto se está poniendo interesante-dijo David.
Irene soltó una pequeña carcajada.
-¿Sí o no?-le preguntó Alberto.
-Sí, pero, ¿Qué tiene que ver?-contestó Nicol.
-¡Chicos, por favor, discutid de vuestro lío amoroso en otro lado, por favor!-ordenó Claudia que no había hablado casi.
Alberto dejó la frase que estaba diciendo y se metió un churro en la boca.
El móvil de Irene sonó. Sacó su móvil y leyó el WhatsApp.
-Nicol, es de tu primo Peter, hacia tiempo que no me decía nada. La verdad es que es un cielo. Respetó mi opinión y no fue pesado-comentó Irene.
David se puso tenso, ya que Irene le gustaba y estaba hablando de un chico guapo, un año mayor, y según ella, un cielo.
-Irene, acepta de una vez. Tú misma lo has dicho, es un cielo. Y si a ti te gusta...-repuso Nicol.
-Ya hablaremos de eso más tarde.
Se acabaron su merienda y volvieron al internado. Las calles estaban frías, y no apetecía nada estar fuera.
Nicol, Irene y Carol entraron en su habitación. Allí, la estufa ya estaba puesta, y Adel jugaba en su portátil.
-¿Y Mireya?-preguntó Carol sentándose en su cama
-¿Tú que crees?-le dijo Adel apartando la vista de su portátil.
-En la bibliotca.
-Pues ya está.
Últimamente Mireya se desahogaba en los libros, aún tenía el sentimiento de culpa.
-Nicol, ¿Aquí montan algún árbol y ponen guirnaldas?-le dijo Carol a Nicol pensando.
-Sip. La semana que viene lo montarán. O eso hicieron el año pasado.
El móvil de Irene sonó de nuevo, pero esta vez era una llamada.
-Pon el altavoz-le sugirió Adel.
Irene puso el altavoz y la voz de su hermana se escuchó.
-Ireneeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee.
-Hola Elena, ¿Qué quieres?
-Te llamo desde el teléfono de casa. Pues que mira, ha llegado un paquete. Esta encima del felpudo de la puerta de la entrada. Es del vecino. ¿Te lo abro o que?
-Ehh... ¡No! Traerlo mañana, como váis a venir.
-Vale. Pues hasta mañana miss Mandona.
Irene colgó,
-¡Qué fuerte! Ahora que lo pienso, si os hacéis novios, tu y yo seremos família-informó Nicol alegre.
*****
Al día siguiente, Irene se despertó animada. Se vistió con una de sus mejores camisetas y desayunó.
Esperó con impaciencia a las 12. Cuando su reloj pitó, supo que era la hora, bajó hasta la puerta principal, y solo tuvo que esperar 5 minutos, cuando sus padres y su hermana aparecieron.
-¡Papá, mamá!-exclamó feliz.
-Si que tienes ganas de vernos-añadió Cristina.
-Mamá, no es eso, lo que ella quiere es el paquete-razonó Elena.
-Ahhhh-murmulló Cristina un poco triste.
-Pues que sepas que nos lo hemos olvidado.
-¿Qué?-dijo Irene.
Se le cayó el alma a los pies.
-¡Qué es broma! Lo tengo aquí, toma-dijo entregándoselo su padre.
-¡Papá! No se lo tenías que dar-bufó Elena.
Irene le dedicó una sonrisa malosilla.
-¿Qué tal... como era? ¡Ah, sí! ¿Que tál Melón?-le preguntó Irene esperanzada de que ese era el nombre del hámster y no la había cagado.
-¿Melón? ¡¡¡KIWI!!!-exclamó enfadada Elena.
-Ups, perdona-se disculpó Irene.
Caminaron hasta un restaurante.
En el restaurante, Irene fue al baño con el paquete.
Lo abrió, y dentró encontró una nota, y una caja.
Abrió la nota y leyó:
-Irene, que sepas que cuento los segundos que faltan para que vuelvas del internado para las vacaciones. Ahora te faltan 13 días, 8 horas, 34 minutos y 22 segundos, 21, 20... Como esto lo recibirás el Sábado, faltarán 12 días :) Te regalo esto para que tú también puedas contarlos, que me ha contado mi prima que dices que soy un cielo.
-¡Maldita Nicol!-pensó Irene.
Abrió la caja, y vio un bonito reloj plateado de manecillas.
Irene sonrió y se guardo el reloj y la nota en su bolso.
Salió y se sentó de nuevo.
-Irene, ¿Has estado cagando? Porque has estado un tiempecillo-le dijo Elena de mala gana.
-Elena, cállate-le ordenó Pablo.
Elena se calló a regañadientes.
Comieron sin ningún comentario negativo de Elena.
Luego, volvieron al internado, como hacían todas las veces que iban a visitar a Irene.
-Nos vemos en 2 semanas hija, pero, la próxima vez te vendrás con nosotros-le animó Cristina.
-Adiós papis. Adiós Elena-se despidió Irene.
Elena le dirigió una sonrisa forzada y después una mirada asesina.
Irene subió a la sala común. En ella, encontró a Nicol estudiando.
-¡Hola Nicol!-saludó alegremente.
Nicol cerró de golpe el libro y lo primero que dijo fue:
-¿Qué había en el paqute?
Irene sacó la caja del reloj, con el reloj dentro y la nota.
Nicol lo agarró a toda prisa y leyó.
-No sabía que mi primo fuese un romántico. Por suerte, no es de esos que un día está con una, otro con otra, algunos amigos suyos sí.
-¿Has solucionado eso con Alberto?
-Sí, en realidad le he dicho que tranquilo, que no le hablaba a mi ex ni nada.
Más tarde, Irene se puso su nuevo reloj y le envió un WhatsApp a Peter diciéndole:
Acepto, acepto salir contigo.
Esperó con impaciencia a las 12. Cuando su reloj pitó, supo que era la hora, bajó hasta la puerta principal, y solo tuvo que esperar 5 minutos, cuando sus padres y su hermana aparecieron.
-¡Papá, mamá!-exclamó feliz.
-Si que tienes ganas de vernos-añadió Cristina.
-Mamá, no es eso, lo que ella quiere es el paquete-razonó Elena.
-Ahhhh-murmulló Cristina un poco triste.
-Pues que sepas que nos lo hemos olvidado.
-¿Qué?-dijo Irene.
Se le cayó el alma a los pies.
-¡Qué es broma! Lo tengo aquí, toma-dijo entregándoselo su padre.
-¡Papá! No se lo tenías que dar-bufó Elena.
Irene le dedicó una sonrisa malosilla.
-¿Qué tal... como era? ¡Ah, sí! ¿Que tál Melón?-le preguntó Irene esperanzada de que ese era el nombre del hámster y no la había cagado.
-¿Melón? ¡¡¡KIWI!!!-exclamó enfadada Elena.
-Ups, perdona-se disculpó Irene.
Caminaron hasta un restaurante.
En el restaurante, Irene fue al baño con el paquete.
Lo abrió, y dentró encontró una nota, y una caja.
Abrió la nota y leyó:
-Irene, que sepas que cuento los segundos que faltan para que vuelvas del internado para las vacaciones. Ahora te faltan 13 días, 8 horas, 34 minutos y 22 segundos, 21, 20... Como esto lo recibirás el Sábado, faltarán 12 días :) Te regalo esto para que tú también puedas contarlos, que me ha contado mi prima que dices que soy un cielo.
-¡Maldita Nicol!-pensó Irene.
Abrió la caja, y vio un bonito reloj plateado de manecillas.
Irene sonrió y se guardo el reloj y la nota en su bolso.
Salió y se sentó de nuevo.
-Irene, ¿Has estado cagando? Porque has estado un tiempecillo-le dijo Elena de mala gana.
-Elena, cállate-le ordenó Pablo.
Elena se calló a regañadientes.
Comieron sin ningún comentario negativo de Elena.
Luego, volvieron al internado, como hacían todas las veces que iban a visitar a Irene.
-Nos vemos en 2 semanas hija, pero, la próxima vez te vendrás con nosotros-le animó Cristina.
-Adiós papis. Adiós Elena-se despidió Irene.
Elena le dirigió una sonrisa forzada y después una mirada asesina.
Irene subió a la sala común. En ella, encontró a Nicol estudiando.
-¡Hola Nicol!-saludó alegremente.
Nicol cerró de golpe el libro y lo primero que dijo fue:
-¿Qué había en el paqute?
Irene sacó la caja del reloj, con el reloj dentro y la nota.
Nicol lo agarró a toda prisa y leyó.
-No sabía que mi primo fuese un romántico. Por suerte, no es de esos que un día está con una, otro con otra, algunos amigos suyos sí.
-¿Has solucionado eso con Alberto?
-Sí, en realidad le he dicho que tranquilo, que no le hablaba a mi ex ni nada.
Más tarde, Irene se puso su nuevo reloj y le envió un WhatsApp a Peter diciéndole:
Acepto, acepto salir contigo.
Q interesante, cuando llega el siguiente capitulo, :)
ResponderEliminarHola!!! Me alegro que te guste.
Eliminar¿Eres una nueva lectora, o ya leías antes pero no comentabas?
Y el siguiente capitulo empezaré a escribirlo o mañana o hoy sobre las 8
¡Muchas gracias por comentar!
Muakis
No ya leía desde hace tiempo y no comentaba.
EliminarMe encantaaa:)
ResponderEliminarAlberto se ha puesto celoso..jejejeje:) Si es que ama a Nicol:)
Menos mal que Irene acepta y sale con Peter:)
Me ha encantado el capítulo, está genial:)
Por cierto, me encanta lo del ratón, ahora me sale una carita sonriente amarilla, ¿cómo lo has hecho? Está genial:)
Besitos:)
Me alegro de que os guste :)
EliminarY sobre lo del ratón, poner en Google: Como cambiar el cursor de tu blog. Y el primer resultado que os salga, ahí os explica todo. Creo que está en una página web llamaba: Ciudad Blogger o algo así.
Muchas gracias por los comentarios.
Muakis!!
¡¡Qué bonito el capítulo!! :)
ResponderEliminarSi es que me encanta todo lo que escribes:) Me ha encantado el cap, ha sido genial:)
Nicol y Alberto tienen que ser novio YA:) Pero novios, novios, oficiales, jeje:)
Peter, qué románticooo:) Me ha encantado el detalle que has puesto con lo del reloj, ha sido súper guay:) Y ya aceptado Irene:) Por fiiin:) Jajajaja xD
Y lo del hámster: Melón.. ¿MELÓN? ¡¡Kiwi!! Jajaja:) Anda que Irene está bien de la cabeza, de melón a kiwi hay un gran paso, xD
Pues nada más, que me encanta, y Loca tiene razón, el ratón está genial y la carita sonriente es súper cuqui:)
Besitos:)
Lo de Mireya no me lo esperaba!!!
ResponderEliminarTambien me ha gustado lo del hamster jeje,
y que Irene al final acepta salir con Peter!
PROXIMO YA!!
Muakiss!
Clara el blog tan chulo como
ResponderEliminarsiempre:)
Pero recuerda sigue escribiendo
que sino todo el mundo mundial se pondra
super,super,super,super,super
triste y enfadado con tigo
Awww, que mono Peter! Aunque seguramente David se ponga celoso cuando lo descubra... Ahora mismo sigo leyendo :))
ResponderEliminarBesos